El sol
Cuánto me gusta el sol de invierno. Los días helados en los que el sol te quema los párpados y la piel, desmintiendo lo que cuentan: que si es frío, que si tiene dientes.
He pasado cerca de la verja y he visto la piscina. El césped que canta bajo los árboles, recuerdo de besos de cloro. La piscina dormida bajo la capa de invierno gris.
Esconderá este invierno sus dientes y volveré a sentir las gotitas en la piel, las punzadas del calor amarillo, los niños saltando al agua.
Porque me gusta el sol.
He pasado cerca de la verja y he visto la piscina. El césped que canta bajo los árboles, recuerdo de besos de cloro. La piscina dormida bajo la capa de invierno gris.
Esconderá este invierno sus dientes y volveré a sentir las gotitas en la piel, las punzadas del calor amarillo, los niños saltando al agua.
Porque me gusta el sol.
A mí también me gusta el sol, sobre todo leer en el parque al sol, y a veces también salir a pasear con mi madre bajo el sol. El sol me hace mejor persona, creo ;-)
ResponderEliminar(¡Cuánto escribes últimamente, qué bien!)