Cuando yo era mocita
Así empiezan algunas abuelas a contar sus batallitas.
La mía suele decir "cuando yo era joven".
Y todas eran guapísimas y tenían a un montón de hombres detrás. Que digo yo que va a ser cosa de la contaminación o algo si resulta que hace 50 o 60 años no había ni una fea en el mundo. Bueno, sin contar a Margaret Thatcher o Yootha Joyce.
En fin, a lo que iba. Que cuando yo era mocita, joven, es decir: cuando no tenía a Minibere, podía quedarme hasta las mil escribiendo (como hoy). Pero esta niña lista, guapa, buena y que come de miedo no podía ser la niña perfecta. Así es que me ha tocado una hija QUE NO DUERME o que se despierta chorromil veces.
El caso es que entre el trajín que es estar pendiente de un bicho y que no descanso, pues no escribo. Ea.
Que he retomado el blog con renovadas intenciones, pero aviso, por si acaso. Si no puedo con mi alma, si no tengo tiempo o si prefiero acostarme junto a su cuerpecito suave para dormirnos abrazadas, ya le pueden ir dando al blog.
Sin acritú.
La mía suele decir "cuando yo era joven".
Y todas eran guapísimas y tenían a un montón de hombres detrás. Que digo yo que va a ser cosa de la contaminación o algo si resulta que hace 50 o 60 años no había ni una fea en el mundo. Bueno, sin contar a Margaret Thatcher o Yootha Joyce.
En fin, a lo que iba. Que cuando yo era mocita, joven, es decir: cuando no tenía a Minibere, podía quedarme hasta las mil escribiendo (como hoy). Pero esta niña lista, guapa, buena y que come de miedo no podía ser la niña perfecta. Así es que me ha tocado una hija QUE NO DUERME o que se despierta chorromil veces.
El caso es que entre el trajín que es estar pendiente de un bicho y que no descanso, pues no escribo. Ea.
Que he retomado el blog con renovadas intenciones, pero aviso, por si acaso. Si no puedo con mi alma, si no tengo tiempo o si prefiero acostarme junto a su cuerpecito suave para dormirnos abrazadas, ya le pueden ir dando al blog.
Sin acritú.
Juraría que ese día, si no dormiste, no era por Minibere. O eso, o que tienes mal configurada la fecha en el blog :P
ResponderEliminarYo era un trasto nocturno. Mi hermano mayor a las nueve estaba ya metido en el sobre y yo, con dos años, siempre tenía los ojos como dos chirimoyas hasta las doce, por lo menos. Una vez mi madre me preguntó que por qué COÑÑÑO no me iba a la cama de una vez.
ResponderEliminarY yo le dije, con las pupilas como dos posavasos, que no me iba "por si me perdía algo"...